Érase una vez una niña que era muy querida por su abuelita, a la que visitaba con frecuencia aunque vivía al otro lado del bosque. Su madre que sabía coser muy bien le había hecha una bonita caperuza roja que la niña nunca se quitaba, por lo que todos la llamaban Caperucita roja.
Sobre Blanca Escudé
Os quiero presentar mi labor como escaparatista; englobando todo un mundo relacionado con el arte de la estética comercial.
blkescaparates@gmail.com 658627273 Blanca Escudé